Como han demostrado recientes investigaciones científicas, somos seres tricerebrados, y nuestra salud depende del equilibrio entre el pensamiento, las emociones y las acciones. El sufrimiento personal y las dificultades en las relaciones, son el resultado de la falta de equilibrio entre estos aspectos del ser humano.
Todes nosotres aprendemos en nuestra vida a priorizar alguno de estos aspectos y a desatender otros, y el desequilibrio resultante, se proyecta en el exterior. La Gestalt te acompaña hacia un entendimiento, en aquellas situaciones de la vida que te hacen sufrir, favoreciendo la presencia, consciencia y la responsabilidad, en el aquí y ahora, en el presente. Explora como la desarmonía entre el sentir, el pensar y el hacer, afecta la relación de la persona con ella misma, su mundo interno, y con su entorno, su mundo externo. Busca el auto-sostén personal, dentro del marco de la terapia Gestalt, quiere decir, hacerse responsable y consciente de aspectos personales que se guardan en la sombra, que nos cuestan de sostener o que nos impiden avanzar, con el objetivo de transformarlos. El autoconocimiento es el mejor antídoto para ser personas más íntegras y amorosas.
El trabajo grupal, me ha sido muy útil y necesario, ya que en grupo, es más fácil que aparezcan nuestras resistencias. Aprendo a poner atención y conciencia de cómo me coloco en el grupo, donde, qué lugar ocupo y cómo es mi relación con el resto. Para mí, la Gestalt es acercarme a un espacio de paz y quietud, donde desarrollar la experiencia de estar más tranquila conmigo y con los demás, darme ese permiso y responsabilizarme de los aspectos de mi misma que me generan tensiones. Lo más importante y sanador, es el vínculo que se establece y el espacio de no juicio que la terapia Gestalt promueve, tanto en lo grupal como en lo individual. El Juicio es constante, juzgarnos, ya que lo aprendimos desde pequeños, tu juez es el que sabe lo que está bien y lo que está mal, es ese juez interior que hemos ido construyendo. Conocerlo y dialogar con esta parte nuestra, para darle un lugar y que deje de funcionar irregularmente, es otro de los objetivos en la terapia.